Hitler conquista el poder.

La crisis de 1929 afecta especialmente a Alemania, y las masas de clase media ven en el nazismo la salvación ante el influjo comunista. Tras alcanzar gran popularidad, Hitler se postula como candidato en las elecciones de Marzo de 1932 contra Hindemburg, este último resultando ganador. Sin embargo, a causa de la inmensa cantidad de gente que votó a su favor, a Hitler se lo otorga la cancillería después de la muerte de Hindemburg, no sin resistencia.

 Hitler estrecha la mano del entonces presidente Hindemburg y se le otorga la cancillería en 1933.

Fusionando el puesto de canciller con el de Führer, Hitler queda como líder supremo del Reichstag, el tan famoso tercer Reich. El Reich de los mil años.

Desfile del partido nazi donde Hitler es rodeado por cientos de simpatizantes apoyándolo en su campaña.

Purga las filas nazis durante la "Noche de los Cuchillos Largos" en 1934, donde quita del camino a su antiguo amigo Ernst Rohem, líder de las S.A. que era un grupo armado que ayudó a Hitler a incrementar su campo de acción a través del miedo que inflingían y a combatir a los comunistas. Restaura el servicio militar obligatorio en 1935 y remilitariza Ranania en 1936.

Una policía paramilitar es creada, conocida como la Gestapo, para controlar el orden y velar por la seguridad del estado y la pureza de la raza aria.
Poco a poco el odio hacia los judíos de parte de la población ha ido creciendo y en 1938 tiene lugar la " Noche de los cristales rotos ", cuando miles de judíos fueron asesinados y sus tiendas y posesiones destruidas, en una violenta represión, violencia que degeneró en los campos de concentración, a donde los judíos eran llevados y algunos eran obligados a trabajar mientras que otros pasaban directamente a ser exterminados.
Seis millones de judíos murieron en estos campos. Los campos de exterminio, donde Hitler llevaría a cabo el asesinato sistemático de los judíos, fue conocida como " la solución final".